Expedientes que se acumulan, casos que demoran en resolverse, juicios que se posponen, justicia que se retrasa. Tucumán, como gran parte del país, está sufriendo una situación que parece no tener solución, al menos en el corto plazo: las vacantes en el fuero federal, que están haciendo mella en el servicio de Justicia. En Tucumán hay 19 cargos electivos de la Justicia Federal, de los cuales seis están vacantes, el 32%. La situación puede notarse en todos los estamentos de la Justicia Federal en la provincia; en algunos casos, quienes padecen lo que sucede advierten que viven momentos dramáticos.
La situación más complicada se da en el Tribunal Oral Federal, donde desde la jubilación de Gabriel Casas queda únicamente Carlos Enrique Jiménez Montilla como juez titular. Es decir que desde mediados de 2021 hay ausencias en el tribunal, que hace cinco años estuvo completo por última vez.
Ya en noviembre del año pasado la Cámara Nacional Electoral había advertido sobre la falta de jueces federales en varios lugares del país. Y puso la lupa en seis provincias: Córdoba, Corrientes, Jujuy, Río Negro, San Juan y Tucumán. Junto a Jiménez Montilla actualmente hay dos jueces subrogantes, Noel Costa del TOF de Córdoba, y Enrique Lilljedahl del TOF de Catamarca.
Actualmente todos los juicios se desarrollan de manera virtual en lo que a la presencia de los jueces se refiere, y con agenda acotada, ya que Costa y Lilljedahl deben atender también los procesos de sus propias jurisdicciones. “Hay audiencias todas las semanas, pero los procesos se acumulan”, dijo una de las fuentes consultadas.
Esta situación motivó quejas justamente por no avanzar en la cobertura de cargos. La última acción que se realizó en ese sentido ocurrió el 5 de julio de este año, cuando el Consejo de la Magistratura aprobó una terna de jueces para integrar en TOF Tucumán. En 40 minutos, los consejeros repasaron el orden del día y se aprobó por unanimidad el dictamen correspondiente al concurso 425, destinado a cubrir dos cargos de camaristas. Quedaron conformadas dos ternas que se elevarán al Poder Ejecutivo nacional: la primera formada por Pablo Roberto Toledo, María Virginia Duffy y José Manuel Díaz Vélez (actual titular del Juzgado Federal N 3, que no está funcionando, y que subroga el Juzgado Federal N 1); y la segunda, integrada por Ángel Roger Luna Roldán, Carlos Felipe Díaz Lannes y Patricio Agustín Rovira. El Consejo propuso que en la nómina se incluya como suplente al postulante Facundo Maggio (actual juez de la provincia) porque hay concursantes ternados que están presentados también para otros cargos. Sin embargo no hay novedades acerca de si los candidatos serán aceptados por el Ejecutivo. La coyuntura política, con un posible cambio de color partidario en las próximas elecciones, ralentizaría aún más la decisión.
En el caso de los Juzgados Federales, la situación está un poco más aliviada, aunque hay problemas específicos. En la provincia hay tres juzgados creados, pero el tercero aún no tiene infraestructura, ni personal designado, por lo que no se sabe cuándo comenzará a funcionar. Lo único que ya se hizo fue nombrar a su titular, el mencionado anteriormente Díaz Vélez, quien juró para tomar el cargo el año pasado, pero quien, por no tener logística para ese juzgado, actúa como subrogante del Juzgado Federal N 1. El titular del juzgado Federal N 2 es Fernando Poviña, pero esto podría modificarse, ya que Poviña suena para cubrir alguna de las tantas vacantes en los estratégicos tribunales de Comodoro Py.
En la Cámara Federal de Apelaciones, conformada por Ricardo Sanjuan, Mario Leal, Marina Cossio y Patricia Moltini, la quinta vocalía está vacante desde septiembre de 2018, cuando falleció el juez Ernesto Wayar. A mediados de julio del año pasado se conformó una terna para cubrir ese puesto.
En el Ministerio Público Fiscal, Gustavo Gómez es el Fiscal general titular ante la Cámara Federal de la provincia de Tucumán, Catamarca y Santiago del Estero, y Carlos Brito, de la Fiscalía N 1. La Fiscalía 2 está siendo subrogada por Agustín Chit ya que su titular, Pablo Camuña, está subrogando la fiscalía de Cámara del TOF que no tiene titular. Incluso está creada la fiscalía 3, pero al igual que el juzgado de la misma denominación no tiene titular, ni edificio.
El único estamento que está cubierto es el Ministerio Público de la Defensa, que tiene tres cargos, todos ocupados.
Actualmente, cuando un cargo de juez o fiscal queda vacante, se abre un concurso público para cubrirlo. El de los magistrados se sustancia en el Consejo de la Magistratura, y el de los fiscales en la Procuración General de la Nación. El concurso finaliza con una terna que se envía al Poder Ejecutivo, puntualmente al Ministerio de Justicia de la Nación. Allí se elige a uno de los postulados y envía su nombre al Senado para su designación. Históricamente la etapa que más tiempo lleva es el concurso. Cuando llega al Poder Ejecutivo y al Senado, si bien se deben cumplir una serie de plazos, el trámite debería ser rápido. Pero eso no está sucediendo. Y el ciudadano es el que más lo sufre.
La situación nacional: las vacantes no son sólo un problema local
En Argentina hay 1.002 cargos de magistrados de primera instancia, de cámaras y de tribunales orales federales y nacionales en todo el país, de los cuales 275 están vacantes, y 178 tienen trámite en el Consejo de la Magistratura. En el Senado hay 49 postulantes presentados, y en el Poder Ejecutivo, 48. Es decir que el 27% de los cargos está sin ocupar.